abril 20, 2006

siempre se mira la lámpara sobre mis ojos
y alumbra esas caras unos tropos
que quieren decir gritar algo
o escribirlo

sobre la lámpara rojiza
yo traigo la lluvia helada con mis ojos
mientras peino las paredes y les escribo nombres
palabras

mis ojos buscan las palabras
mirando la muerte me miran a mi
sobre la lámpara
a mi que tengo voz y la escribo encendiendo cada cosa que sale de mi boca como de una cueva oscura

una vez se pararon frente a un árbol
que parecía gritarles ¡ahora! ¡ahora! ¡si! ¡ahora!
ella dijo algo de calaveras o de peces mientras miraba el árbol
él no recuerda por qué pero pensó en abejas
y siguió mirándolo
como escuchándose
sin besarla nunca
mientras miraba el árbol
y se quedó rodeando el tronco hasta sembrarse

abril 16, 2006

Escrito de Rosa Silverio

Acabo de llegar de vacaciones de semana santa, y aunque me pude llevar mi compu no pude entrar a internet, así que me puse al día entrando en los blogs que frecuentemente visito, y yo, que casi nunca entro a los periódicos dominicanos a ver qué pasa, me encuentro con un post de Rosa Silverio en el que comenta la última estupidez que dijo el cardenal sobre los homosexuales. Como yo estoy harta del asunto, como yo no puedo ni podré entender por qué carajos el cardenal y la Iglesia se mete tanto en los asuntos de Estado, como si realmente fueran importantes sus "mandatos y requerimientos" acerca de los asuntos del país, y como yo estoy definitivamente de acuerdo con todas y cada una de las palabras de Rosa Silverio sobre el tema, hoy me dispuse a publicarlas aquí en mi blog, en este blog donde jamás en mi vida había publicado nada que tuviera que ver con política o religión o con nada que no sea literatura, poesía, y lo hago porque creo firmemente que debemos hacer algo o alguien debe hacer algo para que ese señor deje de ofender de manera tan bestial a los homosexuales, no es posible y me averguenza cada vez que este hombre la arremete contra cada uno de ellos y ellas, contra cada uno de nosotros que tenemos una sexualidad mas o menos definida como heterosexual, porque cada vez que ese señor se refiere a los homosexuales como normalmente lo hace, me siento tan ofendida, me siento tan denigrada, tan impotente, me gustaría, primariamente, entrarle a batazos al cardenal, pero sé que no puedo, y me da rabia, me da rabia que ese hombre se exprese de esa manera y que los periódicos lo publiquen y que la sociedad se haga eco de sus mierdas, me da rabia que lo que él diga en materia de Estado salga publicado como algo importante, cuando la iglesia tiene tantos asuntos turbios que debería estar investigando. En fin, les dejo a todos con el escrito de Rosa, que me pareció excelente y que comparto en toda su extensión.

Declaraciones del cardenal dominicano

Hace unos días leí una noticia que me consternó hasta los huesos. El cardenal dominicano Nicolás de Jesús López Rodríguez dio unas declaraciones a la prensa sobre los homosexuales que salieron en todos los periódicos dominicanos, incluso las agencias como EFE y los portales como Terra, se hicieron eco de esta barbaridad.
El cardenal pidió (o exigió) que se expulsaran a todos los homosexuales de la zona colonial de la capital y que se queden en Europa o en Estados Unidos "porque aquí no necesitamos esas lacras sociales". Explicó que no se puede permitir que el centro histórico se convierta en un patrimonio de "degenerados extranjeros y dominicanos".
La nota que sale publicada en Listín Diario cita las palabras textuales del religioso: "Dejemos a los homosexuales que están en Europa muy por su cuenta. Aquí estamos viviendo de una manera más primitiva, pero mucho más sana de la que están viviendo los europeos".
La nota publicada por el Caribe dice aún más, pues según este diario el cardenal exigió que se saquen a todos los homosexuales del país: “Nosotros lo que necesitamos es sanear esto, sanearlo pero de verdad y tener una zona colonial como la de todos los centros histórico".
¿Qué les parecen estas perlas emitidas por el máximo representante de la Iglesia Católica en República Dominicana?
Respeto que esta religión (y las demás) no admitan a los homosexuales dentro de su congregación. Son entidades privadas que están en todo su derecho de hacerlo, total, aunque ellos se lo crean, no son dueños de ningún Dios, si es que existe alguno.
Puedo respetar, aunque no entender, ese rechazo de la comunidad religiosa por quienes tienen una preferencia sexual que no sea la heterosexual, pero es una total falta de respeto y un abuso de poder público, que el cardenal se refiera a los homosexuales como si fueran perros (o peor que eso). Para ese señor los gays no tienen familia, ni amigos, no pagan impuestos, no sirven ni para limpiar el fregadero. Son peor que un estropajo.
Me encanta (con ironía) ver al caballero regodearse y mandar a la mierda a los homosexuales por considerarlos lacras sociales, pero me pregunto porqué él y todos los de su iglesia no hacen lo mismo con los pederastas que hay en su congregación. No entiendo porqué al cardenal sólo le preocupan los "pájaros" que andan por la calle y primero no comienza a sanear las iglesias y a meter presos a los sacerdotes que violan a nuestros niños y niñas. Eso sí que sería dar un ejemplo de cómo se puede sanear el país (y todo el mundo) de verdaderos criminales.
Resulta curioso ver cómo la iglesia protege en su seno o se hace de la vista gorda ante los religiosos que cometen delitos, pero están muy atentos a las pajitas del ojo ajeno. Como dije al principio, los católicos o los que pertenecen a otra religión, no tienen porqué aceptar aquello que ellos consideren que va en contra de su fe, pero lo que sí tienen que hacer es respetar la integridad y dignidad de esos seres humanos que el Estado debería proteger porque son ciudadanos con derechos, y a los que se les exije (como a los heterosexuales) que cumplan todos sus deberes y que paguen sus impuestos.
Algo que me llama poderosamente la atención de las declaraciones del cardenal, es que para él Europa y Estados Unidos son lugares parecidos a Sodoma y Gomorra. Él dijo que los europeos y los gringos viven de una manera perniciosa y abominable, y que República Dominicana está mejor que Lola porque aunque somos "primitivos" nos comportamos de manera más sana.
Me gustaría preguntarle al señor si para él vivir de forma sana es formar parte de la cadena de corrupción que hay en este país, ser indiferente y permitir que la iglesia se inmiscuya en asuntos que no son de su competencia, pasar hambre, morirse en un hospital porque no hay medicamentos, salir a la calle con temor de que alguien nos pegue un tiro o nos viole, perder un semestre porque la universidad pública no está dando clases, o tragarnos un cable mientras el honorable Presidente se va de gira por Europa con 60 personas (imagino que se llevó hasta el peluquero) y la primera dama sale corriendo presurosa por las calles de Londres a comprar un abrigo de visón y luego aparece retratada con la reina de Inglaterra luciendo un modelito amarillo pollito y un sombrerito blanco de lo más "chic y caro" como diría Francisco Sanchís.
Si esto es vivir de forma sana entonces este lugar está lleno de pervertidos que abarrotan los consulados para ver si le dan el visado y poder irse a trabajar fuera para mandar sus remesas, las cuales constituyen una de las mayores fuentes de ingresos del país.
Me sorprende también que el cardenal se refiera de esa manera de Europa y Estados Unidos, pues bastante veces que él ha ido por esas tierras a cenar y disfrutar de los lujos que la mayoría de los dominicanos no pueden darse aunque trabajen de sol a sol.
Pero más aún me sorprende que este caballero se refiera a la comunidad homosexual de esa manera y que ningún grupo haya salido en su defensa a decir algo, o que los medios de comunicación locales no hayan tratado de obtener otros puntos de vista (a excepción del programa Toque de queda con Triálogo que llevó a un gay quien defendió con valentía e inteligencia a los de su clase).
Pero esto no se queda ahí. Quiero que ustedes sepan que dos días después de que este señor dijera todas sus barbaridades, un par de homosexuales que entraron a comprar bebidas a un negocio de la calle El Conde, fueron agregidos por el dueño del establecimiento.
¿Está contento, Cardenal? Imagino que eso era lo que usted quería, una nueva cacería de brujas, una nueva inquisición. Si antes el delito era la fe, ahora el crimen es amar.
Quiero recordarle al señor Nicolás de Jesús López Rodríguez que los homosexuales también son criaturas maravillosas, personas inteligentes y sensitivas, y muchos de ellos han hecho importantes aportes a la humanidad en sus diferentes campos. También quiero recordarle que "todos tenemos el negro detrás de la oreja" y que a lo mejor en su familia hay un pariente querido que sea gay al que él está crucificando y clavándole la lanza en el costado. Y además debo recordarle que, sin importar lo que piense, su investidura no le da derecho para denigrar y mandar a expulsar a ciudadanos dominicanos que pagan sus impuestos, que trabajan dignamente y que amparados por la ley ejercen libremente su sexualidad. Esto, más que un asunto de religión, es un asunto legal y el cardenal no tiene ninguna prerrogativa legal para mandar a expulsar a nadie.

Escribo esto porque como dominicana me sentí muy ofendida por esas declaraciones y porque es mi deber. Creo que si Nicolás quiere que respeten a la Iglesia Católica y que lo respeten a él, primero debe respetar a todos los dominicanos, incluyendo a los homosexuales.

http://rosasilverio.blogspot.com

abril 06, 2006

altar

todo el día oliéndome las medias
haciendo las maletas
mientras miro afuera
guardando la pasta dental en los bolsillos
esperando
sin bultos fundas o cajas
abriendo la ventana
contándome las venas
remendando los hoyos en las sábanas
escuchando a los vecinos masturbarse todo el día

todo el día Janis Joplin pidiéndole algo a dios
yo escucho a la gente que viene hablando con dios
cuando llegan de pasear a sus perros
dejando monedas de mierda en la acera
mientras yo espero

todo el día todo el día besándome las manos para que no me hieran
pensando en esa casa en esa vela en esa mesa
todo el día torciéndome los dientes
metiéndome formol por la nariz con miedo
con mucho miedo a pudrirme

todo el día deshabitando el altar
yéndome sin moverme
revisándome las orejas y el ombligo
esperando bajo la mesita de noche

abril 04, 2006

sigo pegada a mi cuerpo
contando las uñas que caen en la escalera
mis orejas cada vez más pequeñas
y mi cabello cayéndose
el ascensor es mi único refugio

la lámpara se burla de mi
se ríe de mis pocos dientes
del amarillo de mis pocos dientes
yo le arrojo palillos
y sé perfectamente que estoy enloquecida

sé que sigo viva
sé qué escucha mi cuerpo
entre la cama y el techo
algo que vibra algo que existe
que mira sobre mí
es lo único que veo
cada vez que despierto

cada vez hay más gente que no me llama
ayer se pudrieron las frutas de la canasta
cada vez se pudren más rápido las frutas en la canasta
y yo sigo pegada a mi
como lámina
yo soy la lámina
que se pega a mi cuerpo
la escucho decir
espejo rincón
espejo